Reacción similar genero en otras personalidades que no pudieron menos que hacer comentarios sobre el mismo tema, o pedir para las próximas reuniones no perder la oportunidad de hacer cambios que ayuden a preservar la casa común, como lo hizo el Papa Francisco I.
La presidenta Carolina Schmidt, dijo en la clausura “que se terminaba con acuerdos mínimos”, algo que considero insuficiente, y tal vez hasta irresponsable para la situación de emergencia en que nos encontramos. La falta de liderazgo fue notoria, al grado que la Presidenta sólo pudo lograr el acuerdo unánime de un “NO” cuando solicito a los asistentes que mandaran sus propuestas de forma digital, permite ser sarcástico ya que ella buscaba el “SI”.
Participaron 200 países, los que por lo visto siguen más preocupados por sus agendas políticas, que por la Tierra y las personas. Para algunos la falta de compromiso de países como EE. UU., Brasil, Australia, China, Rusia y Arabia Saudí entre otros, lo evita que se logren avances según argumentan algunos de los países participantes, usando esto como escusa para no apoyar o participar más activamente en estos cambios y acuerdos.
Lo que si se logró es que más de 80 países se comprometieran con presentar planes más duros en las próximas reuniones de Bonn, donde se realizará un nuevo encuentro, y del cual seguirá la crucial cumbre de noviembre, la COP26 en Glasgow 2020. Esto sólo me deja ver que seguimos con el efecto Coca-Cola (por su compromiso con un mundo sin residuos por sus botellas de plástico, pero para el 2030), todo lo vamos postponiendo a futuro, pero dando la idea de que estamos haciendo algo. Aunque lo único que hacemos es hacernos como el tío Lolo, “mensos solos”.
El cuidado del planeta no debe ser un tema de género, sin la Tierra no tendremos donde habitar, ni hombres, ni mujeres; por lo que para mí fue triste oír en el cierre del evento a la presidenta Carolina Schmidt decir que “Como ex ministra de la Mujer, me emociona que hayamos aprobado ese artículo para fortalecer su papel porque las mujeres somos más vulnerables al cambio climático pero también somos un poder transformador”, al destacar que en el documento pactado y aprobado se incluye un plan de acción de género para dar respuesta a los efectos del cambio climático en mujeres y niñas. Creo que, al hablar del medio ambiente, del clima, de la naturaleza no incluir a hombres y niños es una discriminación, que le da al genero masculino una superioridad ante estos cambios en la naturaleza como para pensar que pueden quedar fuera de un plan de acción. ¿Qué documento o estudio científico respalda que el genero masculino es menos vulnerable ante efectos de la naturaleza? Creo que en este tema la acción, la responsabilidad, el compromiso y otros temas tienen que ser de todos. Sin importar género, edad u otro; ya que todos impactamos, todos dañamos y todos tenemos que participar para hacer el cambio.
Podría resumir que el fracaso de esta cumbre estuvo en que los participantes (países) no estuvieron a la altura, los intereses económicos, políticos y energéticos siguen marcando las agendas de estos eventos, falta un liderazgo real que permita entender la situación que estamos viviendo y que las acciones que se deben de tomar son drásticas y hoy.
También creo que todos debemos ir dejando el efecto Coca-Cola de lado, y enfocarnos en hacer cambios personales. Si las personas a titulo personal cambiamos hábitos tomando conciencia de la situación, llegará un día que no importe que deciden los países en sus cumbres, los cambios ya estarán hechos. Tampoco necesitaremos que se aprueben leyes, tendremos la conciencia de que es lo que no debemos hacer aunque no haya algo que lo prohíba o sancione.
Siempre oigo que lo que más amamos son nuestros hijos, sacrificamos todo por darles lo que consideramos lo mejor, tristemente son cosas materiales o cosas que compramos con dinero. ¿Pero los amaremos tanto como para sacrificar nuestros hábitos actuales y poder darles algo más importante, algo como una casa llamada Tierra en condiciones de ser habitada?