El Visitante del Jardín
Fue un crudo invierno. Parecía que la fría presencia que cubrió el jardín no terminaría nunca, aunque el invierno no llegó a vestir este rincón con el blanco manto de la nieve, sí lo hizo con la transparencia y brillos…
Fue un crudo invierno. Parecía que la fría presencia que cubrió el jardín no terminaría nunca, aunque el invierno no llegó a vestir este rincón con el blanco manto de la nieve, sí lo hizo con la transparencia y brillos…
Un día, hace muchos años, descubrí con gran alegría que tenía un caballo. Era un hermoso potrito, tordillo y rodado; apenas podía sostenerse en sus delgadas y frágiles patas, lo que lo hacía ver torpe y desproporcionado, sin que esto…